En nuestra vida pertenecemos a varios grupos, ya sean de corte profesional o personal, dentro de los cuales todo se mueve por medio de la comunicación, cada persona tiene sus propias creencias de acuerdo a como percibe los diferentes entornos y trata de moverse de acuerdo a ello, tratando de motivar a los demás a seguir sus propias ideas, y es aquí en donde empieza un intercambio de palabras y empieza el dinamismo en nuestras vidas.

Algunas veces encontramos personas más abiertas a escuchar diferentes ideas y otras que no pueden cambiar sus propias convicciones y prefieren continuar solas. Si trasladamos esta idea a un ámbito dentro de una empresa, es aquí cuando se fragmenta el sistema y se empiezan a crear lo que comúnmente llamamos “Feudos”, cada área sigue sus propios objetivos de acuerdo a lo que creen que es mejor para la organización y lo que los llevará al éxito de sus campañas.

En esta situación es donde se demuestra la capacidad de comunicación de los individuos que integran cada área, que al fragmentar el sistema siguiendo sus propias ideas, no se dan cuenta que la organización entra en un estado estático y cuando se sientan a revisar los resultados en conjunto se sorprenden que no son los esperados, es cuando se requiere el liderazgo y motivación de una persona que realiza el rol de CEO para lograr integrar todas esas ideas en una sola para bien de la organización.

Las características más encontradas en los altos ejecutivos son sus altos estándares de enfoque a resultados y la visión para la planificación de los objetivos y la habilidad para llevar todo eso a la ejecución. Otras que comúnmente encontramos pero no son las más positivas son el ego y el apetito de poder para controlar todas las situaciones. La empresa diariamente enfrenta dificultades y algunas veces, por la falta de capacidad de comunicación de sus directivos, esas dificultades se convierten en problemas y pueden llevar a la empresa a tener malos resultados.

En los párrafos anteriores  estamos haciendo la combinación de los que es la comunicación y como el liderazgo puede influir en mejorarla, y llevar a una organización al éxito, y es aquí en donde un buen Coach puede a poyar a los individuos de las organizaciones para poderse integrar con sus compañeros y seguir la misma visión.

Tomando en cuenta la cultura de en la empresa y los objetivos que desea alcanzar, es importante identificar si los altos ejecutivos están en línea con ellas, ya que en una organización todo se permea en cascada, y para querer lograr que la empresa se mueva en el rumbo correcto, se necesita garantizar que todos están en el mismo camino desde los altos ejecutivos hasta el personal que tiene contacto directo con el cliente.

Utilizando el coaching podemos ayudar a mejorar el comportamiento de los altos ejecutivos y alinearlo con mayor asertividad a lo que la organización necesita, para de esta forma apoyar a que el sistema trabaje en armonía y cuente con la mayor flexibilidad para poder conducir al personal al logro de los objetivos.

El líder y la comunicación

La fuerza del líder se refleja en su forma de crear futuro a su equipo de trabajo y llevarlos al logro de objetivos en conjunto.

La fuerza y carácter de los ejecutivos para transmitir sus ideas es de gran importancia en la organización, con el coaching se puede enriquecer esas habilidades, alineando la de todo el equipo directivo dirigidas para el bien común. Poniéndolo en un ejemplo más sencillo, es como un equipo de foot ball, puedes tener grandes estrellas y excelentes goleadores, pero si no se enfocan a trabajar en equipo y compartir sus virtudes con los demás y apoyar a exaltar las de otros miembros del equipo, el resultado final será una mala ejecución del partido en el terreno de juego y con ello el perderlo.

Es todo un reto y es muy interesante el tener como objetivo el alinear a un grupo de personas a un mismo objetivo, ya que cada quien tiene su propia definición de cómo ve las cosas, con las intervenciones del Coach en la organización y la ética del enfoque para guiar a los coachees de acuerdo a sus convicciones y que se alinien con las de la empresa, es un proceso que toda organización debería de implementar como algo común. 

Últimamente los líderes han tomado conciencia de que la comunicación es la base de todo inicio para poder emprender a lograr los objetivos necesarios para la empresa, y ha empezado a implementar estrategias para alinear a las personas y motivarlas a seguir las acciones que lleven a la correcta ejecución y al logro de los resultados. Estas estrategias están compuestas por varios canales de comunicación, no solo de arriba hacia abajo, si no también han empezado a escuchar al personal para tomar en cuenta su opinión y el cómo mejorar los procesos que al final benefician al cliente. Esta apertura apoya a la empresa a ser un sistema dinámico y flexible que está abierto a cambiar su propia realidad y mejorar día a día.

Todo lo que suceda dentro del sistema es importante, ya que impacta al resultado de la organización, y el estar abiertos a escuchar y permitirse el transformar las ideas es la base de éxito de toda empresa, y esto se logra con la apertura a escuchar de los miembros que integran la organización, con lo que definimos que la comunicación es la base de todo movimiento enfocado al crecimiento como individuos, como equipo y como organización, todos visualizando el mismo objetivo, siendo integradores y tomando riesgos para hacer los cambios necesarios y reforzar el crecimiento consistente para todos y que se vea reflejado en todos los ámbitos, tanto profesionales como personales, individuales y como equipo.

Toda organización está compuesta por personas, pongamos las herramientas necesarias para apoyarlos a construir una buena comunicación, apoyándolos individualmente para que se refleje en el equipo y se logren los resultados que se quieren como organización, y al lograrlos cada individuo se llevará también su satisfacción por ver los logros personales integrados en el de la empresa.